En la mesa de "Ahora Vengo", el programa que conduce Luis Mino, AIRE reunió al ministro Juan Manuel Pusineri (Trabajo), a Ana Ingaramo (Movimiento de Organizaciones Barriales) y a José Luis Ambrosino (Los Sin Techo) para analizar medidas y políticas para sacar a más santafesinos de la pobreza y la indigencia.

En la provincia de Santa Fe, la pobreza cayó al 38,6% a fines del 2021, según la última medición difundida hace una semana por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec). La indigencia también bajó al 8,8% de la población. A pesar de la disminución, los números siguen siendo alarmantes. Por eso en "Ahora Vengo", el programa que conduce Luis Mino, se organizó una mesa para analizar a fondo este tema, con la participación del ministro de Trabajo, Juan Manuel Pusineri, la representante del Movimiento de Organizaciones Barriales, Ana Ingaramo, y el representante del Movimiento Los Sin Techo, José Luis Ambrosino.

El primer eje de debate giró en torno a las protestas de los sectores populares por la situación actual (con el trasfondo del corte que realizó este jueves en la costanera el Polo Obrero Tendencia). Ingaramo destacó que es importante hablar de la criminalización de las protestas sociales y la estigmatización de esas movilizaciones de los pobres. "En nuestra sociedad no todo se nombra de la misma manera y molestan las protestas de los sectores populares que reclaman por trabajo y no, por ejemplo, los piquetes del sector agropecuario que dejan ciudades al borde del desabastecimiento", aclaró.

La representante de Organizaciones Barriales explicó que es importante entender que el conflicto que plantean las organizaciones sociales es la falta trabajo. "El Estado debe poner en el centro al empleo, porque sino las organizaciones criminales dan respuesta más rápidamente a los vecinos", advirtió.

Decimos que hay muchos planes sociales, pero la cobertura a la que acceden es mínima", detalló Ingaramo. Actualmente, en el país existen 141. Entre los más conocidos están el Sumar (5,6 millones de beneficiarios), la AUH (4,4 millones), la Tarjeta Alimentar (2,4 millones), Potenciar Trabajo (1,2 millones), Becas Progresar (1 millón), Tarifa Social de energía eléctrica (3 millones) y Tarifa Social de Gas (1,5 millones).

Ingaramo destacó que el IFE estaba pensado para 3 millones y medio de personas, pero terminaron solicitándolo nueve millones de argentinos. En Santa Fe, fueron 691.000 las personas que cobraron el tercer IFE. Además, detalló que de ese total que necesitó del beneficio en la pandemia, solo un 1.200.000 accede al Potenciar Trabajo, y en Santa Fe son solo 43.000 los beneficiarios de este programa. "No todos viven de un plan, hay que desmitificar que únicamente con eso se puede vivir porque son $ 16.500", sostuvo. "El que accede al Potenciar Trabajo es una persona que sale a inventar su propio trabajo", aseguró.

José Luis Ambrosino, por su parte, explicó que el Movimiento Los Sin Techo no comparte las movilizaciones como un mecanismo de lucha, aunque tampoco se opone. "Nuestra gente, la del Movimiento, está incorporada en esas luchas, pero nosotros no lo tenemos como expresión de defensa", indicó. En esa dirección, aseguró que el sector que representan es el indigente, el que no tiene presencia gremial y al que llama "el último hombre".

Ambrosino expuso que para que una persona deje de ser indigente, tiene que cobrar entre $37.000 y $38.000. "Nosotros luchamos por un ingreso seguro, el nivel de indigencia es un derecho humano porque nadie tiene que pensar que este mes no tiene para comer", subrayó. En Santa Fe hay 10.000 familias indigentes, según informó el referente de los Sin Techo, quien recordó que "a todo el mundo pedir un plan social le genera vergüenza", pero aseguró que estas herramientas son importantes porque si el plan no se lo da el Estado se lo brinda un usurero.

En relación con la situación actual, comparada con los años anteriores, Ambrosino sostuvo que la pobreza estructural es menor, pero lo que no cambia es la pobreza que está relacionada con el bajo nivel de ingresos. "Nosotros los sacamos del rancho y le construimos una casa, pero cuando entramos a ese hogar no tienen qué comer", ejemplificó Ambrosino. El ministro de Trabajo, Juan Manuel Pusineri, destacó que es relevante tener en cuenta que la pobreza se mide por ingresos y que en los últimos años hubo una mejora en términos de puestos de trabajo. "En el último trimestre de 2021 hubo 20.000 empleos registrados más que en los últimos tres meses del 2020. Teniendo en cuenta todo el 2021, en Santa Fe tuvimos 88.000 empleos registrados más que en el 2020", destacó.

El funcionario manifestó que "no hay mejor política social que un puesto de trabajo" y agregó que actualmente hay un 35% de empleo informal que debe disminuir. "Allí hay que trabajar porque esto no significa no solo menos derechos, sino menos ingresos", aclaró. Pusineri explicó que desde el Estado se pueden brindar programas para impulsar el empleo, pero también influye la inversión privada y la evolución de la economía. "La pobreza no es fácil de solucionar, porque para hacerlo hay que garantizar mayor producción y mayor inversión", señaló. También remarcó la importancia de incentivar la educación y la eliminación de la barreras que impiden el acceso, como el Boleto Educativo Gratuito. "La escuela pública iguala", apuntó.

Ingaramo aseguró que están de acuerdo con que hay que buscar que haya mayor trabajo ordenado y registrado, pero indicó que mientras eso se logra, hay nueve millones de personas en el país que deben sobrevivir. "No podemos esperar la reactivación del aparato productivo", aclaró. "Durante el gobierno kirchnerista se sumaron 6 millones de puestos de trabajo, lo que equivale a 500.000 por año. Si tenemos en cuenta que 250.000 corresponden a jóvenes que se suman al mercado laboral, necesitamos 20 años para cubrir las demandas de empleo de esos 9 millones de argentinos", precisó.

Ambrosino también opinó sobre la necesidad de generar más empleo. "Tenemos que lograr que se contrate más gente y para eso hay que eliminar algunas restricciones", sostuvo. "Liberen las contrataciones", le pidió al ministro Pusineri, y aclaró que "toda la gente trabaja, lo que no logra es tener un empleo". En esa línea, destacó que "los chicos que andan con el carrito son los que más laburan". Pusineri recordó que no hay nada más flexible que el trabajo no registrado, en el que el derecho laboral no existe. Y sostuvo que con discursos de liberación de muchas cuestiones, se buscó favorecer a otros sectores y no a los trabajadores. "En Santa Fe hay 150.000 trabajadores registrados en las aplicaciones, en las que ni siquiera tienen un empleador; y solo 100.000 en el comercio, que es el mercado que más empleos genera", dijo.

Tanto Ingaramo como Ambrosino, sostuvieron que los planes sociales son esenciales para esta franja de trabajadores que no pueden lograr un empleo registrado y solicitaron al ministro que no sean retirados. Pusineri aseguró que comparte esa mirada. "Hay que visibilizar a los trabajadores de la economía popular, porque no es que quien no tiene empleo no trabaja", dijo Ingaramo. Pusineri sostuvo que comparte la mirada y señaló que es importante mirar las causas por las cuales una personas tiene un plan, antes que generar un concepto rápido y fácil. El ministro remarcó otra prioridad estratégica: la necesidad de capacitar y educar. "Si las personas tienen potencial para el trabajo y están capacitadas, tienen mayor posibilidad de acceder a empleos", detalló.

Fuente: https://www.airedesantafe.com.ar/economia/tres-miradas-la-pobreza-el-trabajo-y-los-planes-sociales-santa-fe-n296054