Los jardines del Movimiento Los Sin Techo cumplieron 20 años de trabajo denodado, convirtiéndose en un factor de estímulo para muchos niños que nacieron y se criaron en las “villas”, como solía llamarlas el fallecido sacerdote Atilio Rosso, creador de la organización. Para celebrar, ayer realizaron una “intervención artística” en la Costanera, desde el faro hasta el Code, para que los santafesinos conozcan esta silenciosa obra que se lleva adelante en los barrios periféricos.
La historia de las salas se pudo apreciar en libros de anécdotas y fotografías reunidas en un solo espacio. También hubo maquetas que confeccionaron los niños con sus maestras sobre los puntos significativos de la Costanera, como un Puente Colgante hecho de madera y tapitas.
En el paseo, se exhibieron trabajos realizados en cada sala por los niños y sus padres. Había canoas en tamaño real hechas en cartón y papel, colgantes artesanales colocados en los árboles, globos y guirnaldas que adornaban los pilares. Los transeúntes podían dejar sus mensajes en un mural traslúcido y recibir abrazos de los pequeños.
Ya con todos los niños reunidos, llegó el momento de la emoción con la entrega de distinciones y reconocimientos a los docentes y otros tantos colaboradores de esta organización. “Quiero decirles gracias a las maestras, a las madres cuidadoras, a los amigos de los barrios, a todas las autoridades que se sensibilizaron con este problema y nos dieron una mano en la educación inicial”, dijo en el acto José Luis Ambrosino, referente actual del movimiento.
También estuvo presente el intendente José Corral, quien destacó que Los Sin Techo “fue pionero en una idea simple: todos nacemos iguales, pero no todos nacemos con las mismas oportunidades, y es por eso que hay una gestión que se puede realizar para hacer la diferencia: la educación; si todos tenemos educación, todos vamos a tener la misma oportunidad”.
La primera sala maternal del movimiento surgió en 1994 en el barrio San Agustín. En estas dos décadas, logró consolidarse en el ámbito educativo de la ciudad con 18 salas de nivel inicial a las que concurren 500 niños de 3 a 5 años.
Fuente: Diario El Litoral